Supongo que todos tenemos al menos una persona en nuestra vida, que lo es todo para nosotros, un amigo o amiga, nuestra pareja, un familiar,... Una de esas personas en las que confiamos ciegamente, que siempre nos cuida y nos protege, quien nunca nos mentiría, a menos que fuera para protegernos del sufrimiento y el dolor, esa persona que es un pilar fundamental en tu vida, la roca a la que te agarras con fuerza cuando todo va mal y parece que nada tiene solución, quien te escucha sin importar la hora que sea o donde se encuentre, busca la manera de poder tenerte a su lado para poder ayudarte y pasar contigo el mal trago del momento, ese alguien con el que te pasarías horas riendo y compartiendo buenos momentos, ese alguien con el que puedes hablar de todo sin excepción, que se alegra con tus victorias, tus logros y que te apoya cuando te quieres rendir porque te han vencido, esa persona sin la que no podrías vivir o eso crees ...
Ese alguien, que cuando por diferentes motivos o circunstancias de la vida, se aleja para siempre de ti crees morir, no ser capaz de sobrevivir sin tenerle a tu lado, que no podrás seguir adelante solo, que te falta el aire, sientes como una parte de tu interior grita mientras lentamente va muriendo, el dolor se hace inaguantable, no sabes como seguir por la vida sin tenerle contigo para superar los malos momentos y para volver a vivir buenos momentos ...